Los garganelli son tubos cortos en forma de rombo típicos de Emilia Romagna, región que se encuentra en el norte de Italia.
Porciones: 4
INGREDIENTES
Masa
2 y 1/2 tazas de harina 000 o la que puedas conseguir
100 gramos de sémola de trigo
4 huevos
PREPARACIÓN
Armado de la masa.
Mezclar la harina y la sémola. Hacer un hueco en el medio e incorporar los huevos.
Ir agregando los huevos a la mezcla de harina ayudándonos con la punta de los dedos.
Una vez integrados continuar trabajando con las manos hasta formar una masa suave y compacta.
Si se necesitase se le puede agregar un poco de agua para terminar de armar la masa.
También se aclara que la masa debe ser de consistencia dura.
Amasado.
Trabajar la masa en forma enérgica aproximadamente 10 minutos.
Doblar de vez en cuando los bordes de la masa hacia adentro y continuar la operación de amasado.
Girarla cada tanto y continuar.
Un detalle que nos indica que la masa está pronta es cuando aparecen en la superficie pequeñas burbujas.
De todas formas es muy notorio ya que la masa es fácil de trabajar, se torna elástica y suave.
Formar un bollo, alisándolo bien con las manos.
Dejarla tapada con papel film o plástico ( nailon, poliuretano ) o un paño.
Lejos de corrientes de aire. Dejarla durante media hora como mínimo.
Estirado de la masa.
Tomar el bollo y dividirlo en porciones. Esto ayudará a extender la masa con más comodidad.
Fomar pequeños bollitos con cada uno de ellos.
Tomar uno y apoyarlo sobre la mesa enharinada.
Espolvorear la masa con algo de harina y ayudándonos con las manos aplanarla un poco.
Comenzar a extenderla con ayuda de un palote ligeramente enharinado.
Apoyar el palote en la mitad de la masa y comenzar a extenderla desde el centro de la masa hacia la parte superior de la misma.
Siempre en forma pareja y dándole forma rectangular.
Continuar así, desde la mitad o centro de la masa hacia los bordes superiores.
Esto hace que los bordes queden parejos evitando que se contraigan al quebrar el gluten.
Una vez que la masa está bien estirada y de aproximadamente 1mm de espesor, arrollar esa mitad en el palote y girar la masa.
Quedando por la tanto la parte arrollada en la parte inferior y la inferior en la superior.
Repetir con esta parte de la masa los mismos pasos.
Armado de lo garganelli.
Se necesita una varilla de madera de un centímetro y medio de diámetro.
Cortar la masa en cuadrados de 4 centímetros de lado.
Arrollarlos de a uno en la varilla de forma sesgada.
Encimar algo las puntas y pegarlas humedeciendo la masa.
Dejarlos que se oreen bien y luego sacarlos con cuidado y apoyarlos sobre una mesa enharinada.
Dejarlos hasta que estén secos.
Cocinarlos en abundante agua hirviendo a la que se le abrá agregado un buen puñado de sal gruesa en el momento que rompe el hervor.
Dejar que se cocinen hasta que estén al dente.
Al dente significa que al masticarla, la pasta está cocida y firme a la vez.