Porciones: 4 o 6
INGREDIENTES
1 kg de papas
2 tazas de harina (240 gramos)
½ taza de almidón de maíz (fécula, chuño) (60 gramos)
50 gramos de manteca (mantequilla)
2 yemas
3 cucharadas de queso rallado fino
Sal y nuez moscada a gusto
Salsa de pollo
1 cucharada de manteca
1 cucharada de aceite
2 cebollas de verdeo
1 pechuga de pollo grande
2 tazas de pulpa (puré) de tomates envasados
1 cucharadita de azúcar
½ taza de crema de leche (nata) (125 cc.)
1 lata chica de champiñones fileteados
1 cucharadita de pimentón dulce
Sal, pimienta
PREPARACION
Salsa
Poner la manteca y el aceite en una cacerola y llevar al fuego hasta que esté caliente.
Incorporar la carne de pollo deshuesada y cortada en cubos y saltearla.
Retirarla e incorporar la cebolla picada y rehogarla con algo de sal.
Agregar la pulpa de tomate, el azúcar y el pimentón. Mezclar y terminar de condimentar a gusto. Dejarla cocinar 5 minutos e incorporarle el pollo. Dejar cocinar 10 minutos más con la cacerola destapada.
Agregar los champiñones fileteados con su líquido y dejar 5 minutos. Por último la crema de leche. Dejar 3 minutos más y retirar.
Ñoquis
Lavar bien las papas y cocinarlas con cáscara y en abundante agua.
Esto es importante ya que evita que la papa absorba demasiada agua resguardando su textura y sabor.
Otras formas de cocción pueden ser al vapor, en microondas o en olla a presión.
Sabemos que están cocidas cuando al introducir un cuchillo en la papa y levantarla ésta cae.
Apenas prontas se retiran y se pelan pinchándolas con un tenedor y quitandole la cáscara con un cuchillo.
Hacer un puré con ellas mientras están calientes pisándolas con un pisa-papas o pasándolas por el molinillo.
Agregar la manteca, las yemas y el queso rallado mezclando hasta unir todo.
Condimentar a gusto. Agregar la harina cernida con el almidón de maíz revolviendo hasta integrarla.
Volcar sobre la mesa y trabajarla con las manos solo lo suficiente como para que se una todo bien.
Se toman pequeñas porciones de la masa y se hace rodar hasta formar un rollo fino y largo siempre ayudándose con un poco de harina.
Se cortan los ñoquis de dos centímetros y medio de largo (el largo de los ñoquis depende del gusto de cada uno) y se van acomodando en una mesa enharinada o cubierta con un mantel enharinado.
Una vez cortados se les da su forma característica haciéndolos rodar por los dientes de un tenedor enharinado o por un marcador de ñoquis.
Se van apoyando nuevamente sobre la mesa enharinada. Se cocinan en abundante agua hirviendo con sal agregándolos de a poco con una espumadera.
Apenas suben a la superficie se retiran.
Se sirven enseguida acompañados con la salsa caliente