Con esta receta aprenderás a hacer una salsa de tomate casera con carne, pero liviana. Esta salsa es ideal para acompañar cualquier pasta. Es sabrosa y no resulta fuerte ni pesada.
4 porciones
INGREDIENTES
✔ 3 cucharadas de aceite
✔ 2 cucharadas de agua
✔ 2 cebollas medianas
✔ pizca de sal
✔ 1 morrón rojo (pimiento, ají dulce)
✔ 2 tazas de tomates pelados y picados
✔ pizca de azúcar
✔ 1 hoja de laurel
✔ 1/2kg de carne picada magra o carne magra cortada en cubos
✔ 1 cucharada de aceite
✔ 1 cucharada de pimentón
✔ 1/2 taza de vino tinto
✔ sal, pimienta
✔ 250 gramos de un queso cremoso y suave (puede ser cuartirolo)
Estos son los pasos para preparar la salsa de tomate casera
Poner una cacerola en el fuego. Una vez que la cacerola se ha calentado, entonces comenzaremos agregando el aceite, el morrón (pimiento) y las cebolla picadas. Salar un poco e ir mezclando todo lentamente.
Cuando notamos que la cebolla se pone algo transparente, es el momento para agregar el agua.
Dejar que la temperatura haga su trabajo, cocinando las verduras, pero solo hasta que notes que las verduras están tiernas. En ese momento incorporamos los tomates, el azúcar y la hoja de laurel.
Volvemos a dejar cocinar, pero esta vez a fuego bajo.
Mientras dejamos que la preparación se siga cocinando, en una sartén pondremos la cucharada de aceite, y doraremos la carne picada. La dejaremos hasta que esté apenas cocida, no la queremos cocinar mucho, solo darle un color dorado.
Una vez dorada la carne, pasaremos a agregarla a la preparación anterior, junto con el pimentón y el vino.
Condimentar a gusto y dejar cocinar a fuego lento por unos 10 minutos.
Luego agregar el queso cortado en cubos, tapar la cacerola, dejar unos minutos y volcar sobre la pasta. ¿No es la salsa de tomate casera más rica que has probado?