Ravioles caseros rellenos de jamón y ricotta

Cantidad aproximada: 250

INGREDIENTES
Masa
5 tazas de harina ( 600 gramos )
1 cucharadita de sal
4 yemas
1 huevo
1 cucharada de aceite
agua cantidad necesaria

Relleno
300 gramos de jamón
200 gramos de ricotta
1 huevo
2 yemas
2 cucharadas de perejil picado
100 gramos de queso rallado
sal, pimienta a gusto

Salsa blanca bien espesa
50 gramos de manteca
6 cucharadas de harina
1 y 1/2 taza de leche
sal, pimienta, nuez moscada

Salsa
1/4 taza de aceite de oliva
1 cebolla mediana
200 gramos de carne picada
2 tazas de puré de tomates
1 cucharadita de azúcar
3 hojas de albahaca
sal, pimienta a gusto

PREPARACION
Masa. Colocar la harina junto con la sal, sobre la mesa de trabajo.
Hacer un hoyo en el centro y poner las yemas, el huevo, el aceite y algo de agua.
Mezclar los ingredientes con las puntas de llos dedos e ir tomando la harina de a pequeñas porciones hasta integrar toda la harina, agregándole más cantidad de agua de ser necesario para terminar de ligar todo.

El agua que necesite la masa, se agregará de a cucharadas para que la masa no se tiernice demasiado por exceso de humedad.
Su consistencia debe ser blanda pero no demasiado.

Amasar durante 12 minutos aproximadamente o hasta lograr una masa elástica, que no se pegue en las manos ni en la mesa.
Tomar el bollo y colocarlo en una bolsa plástica y dejarlo a temperatura ambiente durante 20 a 30 minutos, para que repose.

Pasado ese tiempo, sacar la masa de la bolsa plástica y apoyarla sobre la mesa enharinada.
Dvidirla en varias partes para que con poco volumen de masa nos resulte más fácil estirarla con el palote.

Primero aplanarla con las manos y luego comenzar a estirarla siempre partiendo del centro.
Estirar hacia arriba y luego hacia abajo y hacia los costados dándole forma rectangular.

Les recordamos nuevamente que la masa se estira apoyando el palote sobre la mitad de la masa y haciéndolo girar desde allí hacia el borde superior.

Lo mismo se realiza para el borde inferior.

Esto permite ir quebrando el gluten y llegar a los bordes sin que estos retrocedan o se encogan.

Continuar estirando hasta que la masa esté fina pero no en exceso, aproximadamente de 1mm de espesor. Espolvorear con un poco de harina y cubrirla con un paño para que no se seque.
Continuar haciendo lo mismo con el resto de la masa.

Salsa blanca. Poner en una cacerola la manteca y dejarla sobre el fuego hasta que esté derretida. Agregar de a poco la harina y continuar revolviendo hasta que esté integrada.

Añadir en forma lenta la leche sin dejar de revolver y continuar así hasta que la salsa levante el hervor y espese.
Retirar y condimentar a gusto.

Relleno. Cortar el jamón en juliana y procesarlo junto con los huevos, la ricotta y el queso rallado.

Retirar y poner en un bol junto con la salsa blanca todavía caliente.
Mezclar bien hasta que esté todo integrado.
Incorporar el perejil picado, terminar de condimetar y dejar enfriar.

Armado de los ravioles. Tomar una de las masas estiradas apoyarla cómodamente sobre la mesa de trabajo y con la ayuda de una espátula cubrir la mitad de la masa con el relleno sin que llegue a los bordes.

La distribución del relleno se debe hacer en forma pareja siendo de gran utilidad la espátula para lograr un nivel parejo.
Se cubre con la otra mitad de masa y se marcan.

Los ravioles se pueden marcar con el palote de ravioles.
O bien cortar con rueditas.
O marcar y cortar con rueda doble.
O con placas de plástico.

Todos estos elementos se encuentran fácilmente en cualquier negocio del ramo.

Salsa. Poner una sartén sobre el fuego hasta que esté caliente.
Luego agregarle la cebolla picada, mezclar un poco y condimentarla con un poco de sal. Esto ayuda a que la cebolla elimine más líquido y se pueda rehogar más fácilmente.

Una vez blanda y transparente incorporarle la carne picada.
Ir mezclando y apenas cambia de color la carne se le incorpora el puré de tomate, el azúcar y se deja cocinar unos minutos con la cacerola tapada.

Destapar la cacerola e incorporarle las hojas de albahaca cortada en trocitos chicos y condimentos a gusto.
Si la salsa estuviese muy espesa se le puede agregar un poco de caldo y continuar la cocción a fuego lento durante 15 minutos más con la cacerola destapada o hasta que la salsa tome consistencia.

Cocción de los ravioles. Poner en una olla abundante agua y llevar al fuego hasta que levante el hervor. Destapar, agregarle abundante sal gruesa y a continuación los ravioles.

Dejar cocinar con la cacerola destapada aproximadamente 8 minutos o hasta que estén al dente. Retirarlos de a poco con una espumadera sin que se escurran demasiado e ir acomodándolos sobre la sartén donde está la salsa.

Calentarlos nuevamente y luego distribuirlos en los platos con queso rallado y unas hojitas de menta para completar la decoración el plato.